RUTA TURÍSTICO-LITERARIA
Santa Mª del Campo Rús junto con Castillo de Garcimuñoz y Uclés, forma parte de la Ruta Turístico-Literaria de “EL TRIÁNGULO MANRIQUEÑO”, llamado así en recuerdo del gran poeta y que al trazar en el mapa sus 3 vértices aparece un triángulo que resulta ser como una punta de lanza medieval. Sus tres vértices son las villas por donde transcurrió la agonía y muerte de nuestro gran poeta:
- Castillo de Garcimuñoz: Cerca del Castillo de esta villa fue donde cayó herido Jorge Manrique; capitán de las Hermandades de Castilla que formaba parte de los ejércitos de Isabel, La Católica y que luchaba en aquellos años contra el Marqués de Villena y en una de las escaramuzas cayó herido de muerte de una lanzada en los riñones. A poca distancia del pueblo se encuentra un monolito que los lugareños llaman “La Cruz de D. Jorge” que recuerda este hecho.
- Santa Mª del Campo Rús: Fue en el prado de esta localidad donde Jorge Manrique instaló su campamento militar en 1478, y fue trasladado, después de haber sido herido de muerte en Castillo de Garcimuñoz a una de las casas principales de esta villa, allí hizo testamento y falleció a los pocos días, según las Relaciones Topográficas de Felipe II.
Cuando fue despojado de sus vestiduras se le encontraron, entre sus ropas, unos papeles ensangrentados en que aparecían escritas las dos últimas coplas a la muerte de su padre, que por esta razón son llamadas póstumas.
- Uclés: Don Rodrigo Manrique, padre del poeta, fue Maestre de la Orden de Santiago, sus restos se encuentran en la Iglesia del Monasterio de esta villa. Después de morir Jorge Manrique en Santa Mª, sus restos fueron trasladados a Uclés para ser enterrados al lado de los de su padre. Las tumbas del poeta y de su padre fueron destruidas y sus restos cambiados varias veces de lugar dentro de la Iglesia.
Tres lugares donde discurrió la última etapa de la vida del poeta, autor de las famosas “Coplas a la muerte de su padre”, y para conmemorar estos hechos, el sábado más próximo al día de la muerte del poeta, el 24 de abril, se reúnen los tres municipios en lo que se ha denominado Jornada Manriqueña, y se realizan diversos actos culturales recordando la figura del ilustre poeta.
Santa María está repleta de recuerdos hacia el gran poeta, entre ellos encontramos:
El Monolito, situado en el Prado, lugar donde fue instalado el campamento militar en el otoño de 1478.
El Monumento, obra del pintor León Coullaut y el escultor Manuel Alonso Reguilón. Construido con roelas de piedra situadas de manera espiral y ascendente simbolizando una subida espiritual hacia la gloria y el Más Allá. La figura situada sobre la columna de dos roelas tiene un sentido dual: la muerte que cantó el poeta y la vida, simbolizada por el agua vivificadora que recibe en su mano.
El Centro de Estudios Manriqueños. Posee abundantes libros con ediciones singulares, imaginarios retratos del poeta, sus autógrafos y un políptico de Víctor de la Vega donde se recoge en imágenes los episodios más destacados de la vida y muerte de Jorge Manrique.